En la ciudad uzbeka de Samarcanda en medio de una cumbre con otros líderes de la región vista como un contrapeso a la influencia global de Occidente. Por un mundo cambiante se reunen Putin y Xi Jinping.
Organizado entre jueves y viernes en esta antigua parada de la Ruta de la Seda, el encuentro de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) contará también con los líderes de India, Pakistán, Turquía, Irán y otros países. La cumbre principal tendrá lugar el viernes, pero el evento que genera más interés es la reunión entre los líderes de Rusia y China, que ya llegaron a Samarcanda.
Para Putin, la cumbre es una oportunidad de demostrar que Rusia no puede quedar aislada internacionalmente a pesar de la invasión de Ucrania, donde sus tropas encajaron importantes reveses militares.
El presidente chino llamó a Putin a liderar un mundo cambiante para lograr un desarrollo estable y positivo. “Ante los grandiosos cambios de nuestro tiempo a nivel mundial, nunca antes vistos en toda la historia, estamos dispuestos con los colegas rusos a servir de ejemplo como potencias mundiales responsables y jugar un papel de liderazgo para conducir ese mundo rápidamente cambiante a una trayectoria de desarrollo estable y positivo”, dijo Xi.