El cráter sureste del Etna, el volcán activo más alto de Europa, creció en altura tras seis meses de actividad, según anunció este martes el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia (INGV).
Este cráter más joven y activo del Etna alcanzó a finales de julio un nuevo récord de 3.357 metros sobre el nivel del mar, mientras que durante los 40 años anteriores el punto más alto del volcán fue el cráter noreste, de 3.324 metros de altura.
Desde el INGV precisaron que los aproximadamente 50 episodios de cenizas y lava que han sido expulsados por la boca del cráter desde mediados de febrero han provocado una “transformación llamativa del contorno del volcán”, cuyas dimensiones han sido calculadas a través de imágenes de satélite.