Cada vez más personas mueren cada año a causa de bacterias que se han vuelto resistentes a los antibióticos. Todo esto podría denominarse como consecuencias de pandemia silenciosa.

De hecho, calculan que para 2050 podría registrarse más de 10 millones de muertes al año por dichas bacterias.

Uno de los mayores estudios sobre este tema detalla que más de 1,2 millones de personas murieron en el mundo en 2019 por infecciones provenientes de bacteria resistentes a los antibióticos, así lo recoge el medio de comunicación BBC.

Las bacterias viven en el planeta desde hace más de 4 000 millones de años atrás y según el presidente de la Real Academia de Ciencias Veterinarias, José Villatoro, en una entrevista con EFE, “las bacterias han aprendido a matar al enemigo”, reconocen los antibióticos y se convierten en seres más fuertes para combatirlos.

Villatoro comparó las muertes que se dan por bacterias resistentes y por covid-19. Según lo que comentó, la pandemia de covid-19 ha matado alrededor de cinco millones de personas en el mundo, sin embargo, si no se soluciona el inconveniente con las bacterias resistentes, el número será el doble en los próximos años.

Según El Debate, el Presidente de la Academia de Ciencias Veterinarias indicó que para suministrar antibióticos “hay que ser prudentes”. Esto debido a que los antibióticos son necesarios e importantes, pero las personas suelen tomárselos sin prescripción médica porque “les sobró una píldora de un tratamiento anterior”.

La BBC indicó en un artículo que “el uso excesivo de antibióticos para infecciones menores en los últimos años llevó a que se vuelvan menos efectivos contra infecciones graves“, según les explicó la científica mexicana Gisela Robles Aguilar.

Por lo que eso recae en que, con el paso del tiempo, más personas mueren por infecciones comunes que eran tratables, pero las bacterias ahora se han vuelto resistentes al tratamiento.

Aunque las cifras son desalentadoras, según Robles a BBC, las acciones urgentes que se efectuaron durante la pandemia por covid-19 podría mostrar la dirección en la que combatir este problema.

“Necesitamos medir constantemente el uso de los antibióticos y la resistencia a estos, a fin de conocer el problema de la resistencia y generar soluciones. Y, desde luego, el uso responsable de los antibióticos es una tarea en la que todos podemos contribuir”, dijo Robles.