April Burrel despertó luego de 20 años entre enfermeras, una camilla y equipos por su estado catatónico. La joven sufría del síndrome que impide a la persona moverse e incluso hablar con normalidad, y puede estar asociado con la esquizofrenia y otras enfermedades mentales. Mujer tenía 20 años en estado catatónico.
Este fue el caso de April, quien sufrió un evento traumático cuando tenía 21 años. A partir de ello desarrolló una psicosis que la hizo perderse en un estado constante de alucinaciones visuales y auditivas. Tareas cotidianas como bañarse o alimentarse se fueron convirtiendo en actividades imposibles, y su situación empeoró hasta hacerle perder el habla.
El diagnóstico de los médicos fue esquizofrenia aguda. Un trastorno mental que afecta al 1% de la población mundial. A ello se sumaba el lupus, una enfermedad que ataca al sistema inmune que, en su caso, también estaba atacando a su cerebro.
Todo parecía jugar en contra, hasta que en 2018, el actual director de psiquiatría de precisión de la Universidad de Columbia, Sander Markx, empezó con un tratamiento específico. Luego de varios meses, la joven sorprendió a todos al despertar.
El suceso llamó la total atención de médicos de Nueva York y otras partes de Estados Unidos y el mundo por su particularidad. El despertar de April podría transformar la atención que se les da a algunos de los pacientes psiquiátricos más enfermos.
Científicos de todo el mundo, entre ellos de Alemania y Gran Bretaña, están llevando a cabo investigaciones similares, descubriendo que los procesos autoinmunes e inflamatorios subyacentes pueden ser más comunes de lo que se creía en pacientes con diversos síndromes mentales.
“Estas son las almas olvidadas. No solo estamos mejorando la vida de estas personas, sino que las estamos sacando de un lugar del que no creía que pudieran volver”, afirma Markx.
