Nueva York, que ya hizo lo propio el pasado viernes, ahora los estados de California e Illinois declarado en emergencia, en Estados Unidos, por el aumento de casos de viruela del mono así lo anunciaron las autoridades el lunes 1 de agosto de 2022.
Se da la circunstancia de que los tres estados que han declarado la emergencia son los que albergan las tres mayores ciudades de EE.UU.: Nueva York (en el estado que lleva el mismo nombre), Los Ángeles (California) y Chicago (Illinois).
La declaración de emergencia autoriza a las agencias de los estados a destinar fondos y recursos a ayudar a las localidades para luchar contra esta enfermedad.
EE.UU. ha detectado unos 6 000 casos de viruela del mono en los últimos meses, según datos de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
A finales de julio, los CDC detectaron por primera vez dos casos de viruela del mono en niños.
Trasmisión
Los responsables sanitarios indicaron que ambos casos están relacionados y que lo más probable es que los niños se infectaron en casa por transmisión de un familiar.
La viruela del mono no se propaga fácilmente entre humanos: el contagio se produce a través del contacto cercano con piel infectada, fluidos corporales o gotas respiratorias de una persona infectada con la que se mantienen relaciones sexuales.
Se trata de un virus distinto al de la viruela y que se está transmitiendo fuera de su zona endémica habitual (África Central y Occidental), por lo que es necesario ejercer sobre él un control epidemiológico estricto.
Se considera que una persona es contagiosa desde el inicio del enantema -lesiones en la mucosa oral- hasta que las lesiones se curan y se forma una nueva capa de piel.
Brote leve
Por este motivo, las personas infectadas deben permanecer aisladas hasta que todas las lesiones cutáneas se hayan curado, y evitar especialmente el contacto cercano con personas inmunodeprimidas.
El período de incubación puede oscilar entre 5 y 21 días, y el cuadro clínico suele iniciarse con una combinación de síntomas como fiebre, cefalea, dolores musculares, lesiones características en piel y ganglios inflamados.
Con respecto a su gravedad, los epidemiólogos apuntan que los casos del brote actual están siendo más leves que los descritos en África Occidental, y que apenas están generando ingresos hospitalarios. Sin embargo, recuerdan, las lesiones en la piel y las mucosas sí resultan muy molestas.