En el marco de una manifestación de 300 protestantes que fue desalojada del sitio por el Municipio, un equipo de reporteros guayaquileños fueron agredidos en el mercado mayorista de esa ciudad este 21 de junio de 2022.

Un reportero de Radio Sucre, un fotógrafo de Diario El Universo y un equipo periodístico de Teleamazonas recibieron insultosamenazas con cuchillo en mano y hasta les tiraron morocho caliente en ese lugar, de acuerdo a uno de los 15 reportes de la Red de Periodistas Libres (RPL) ha dado a  conocer en el transcurso del paro, que empezó el pasado 13 de junio.

También la reportera Arahí Vega, de La Hora, fue amenazada por un grupo de manifestantes, en Quito. “Si nos grabas, te damos un palazo”, le dijeron en el marco de las protestas. Ella contó a RPL que durante toda esta semana ha sido impedida de cumplir a cabalidad su labor. 

A esos testimonios se suman los insultos recibidos por equipos de este medio, los latigazos que le dieron en Riobamba a la periodista Evelyn Cuenca, y, de acuerdo a Fundamedios, al menos 70 casos más, lo que preocupa profundamente al gremio y al CEO de esa ONG, César Ricaurte. 

“Esto supera al paro de octubre de 2019”

“Es extremadamente preocupante este escenario. Esto supera al paro de octubre de 2019, cuando se reportaron más de 100 agresiones. Ahora, llevamos 70 en nueve días de paro. La situación se ha desbordado”, dice el también periodista.

Cree que no hay una opción de parte del Estado para hacer seguro el trabajo periodístico, que está claro que no hay políticas de protección a la prensa. También lamenta que “ciertos sectores de intelectuales y académicos se sumen al discurso estigmatizante contra los medios abierta y veladamente. Es negativo, alimenta la violencia contra la prensa”, advierte.

Lo oportuno sería criticar, pero no generalizar, porque los periodistas que están en la calle sufren “una descalificación sin matices que ha provocado escenarios de miedo, odio y vandalismo y deshumaniza a los reporteros y periodistas”.

La desinformación como consecuencia

La coordinadora de la RPL, Verónica Larrea, hace un llamado a que el Estado y los manifestantes, para que faciliten el trabajo de la prensa. “Es inadmisible. No solo ponen en riesgo su integridad, sino que impiden que se informe de manera adecuada”. 

Billy Navarrete, coordinador del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, en sintonía con esa postura, añade que, bajo cualquier circunstancia, el rol de los periodistas tiene que preservarse y garantizarse. “Los bandos que se enfrentan deben garantizar la integridad física y el libre ejercicio de los periodistas en esto. Es condenable lo que ocurre”.

Para Ricaurte, de Fundamedios, estos escenarios llevan de forma inevitable a la autocensura, porque, para garantizarse la seguridad, los periodistas no acudirán a lugares de conflicto, lo que, en consecuencia, provocará la producción de información menos completa. “Los reporteros toman mucha más distancia y tratan de evitar lugares de acción y peligro, lo que es recomendable, pero tiene como consecuencia la entrega de información limitada”, dice.

En un video subido a redes, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leónidas Iza, llamaba a las bases movilizadas a respetar la labor de la prensa esta semana, pero en una conferencia, señaló a los medios masivos de instalar miedo, odio y vandalismo.