Culminó la segunda veda anual del cangrejo rojo, una medida crucial para la protección de esta especie durante su ciclo de muda.
Desde hoy, 1 de octubre, los pescadores podrán reanudar la captura, producción y venta de cangrejo, lo que representa un alivio significativo para el sector cangrejero, que enfrentó desafíos económicos considerables durante este periodo de restricción.
Veda del crustáceo
La veda del cangrejo, establecida mediante un Acuerdo Ministerial, comenzó el 1 de septiembre y se extendió hasta el 30 de septiembre. Esta medida tuvo como objetivo principal asegurar la conservación de los recursos marinos en los ecosistemas de manglares de la costa ecuatoriana, donde el cangrejo rojo desempeña un papel vital tanto en la economía como en la salud del ecosistema.
Durante este mes, se prohibieron todas las actividades relacionadas con la captura, extracción y venta de cangrejos, lo que generó preocupaciones entre los recolectores.
Muchos de ellos dependen exclusivamente de esta actividad para su sustento diario, y la veda representó un desafío económico considerable.