Encontraron a 1 500 personas al interior de un área del parque Samanes en Guayaquil, con la intención de invadirlo.
El intento por invadir parte del parque se inició el viernes, 5 de mayo de 2023, cuando se registró la llegada de personas con machetes, cañas y cintas.
A pesar de la intervención de la Policía Nacional y miembros de las Fuerzas Armadas, la presencia de los invasores se mantuvo durante el fin de semana.
«Se observó alrededor de 1 500 personas en el interior del área ecológica sensible realizando desbroce de vegetación y parcelamiento de terrenos con piolas y estacas», señaló en un comunicado la Secretaría Técnica de Asentamientos Humanos.
Invadir es un delito
El artículo 201 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) pena el uso ilegal de suelo o tráfico de tierras con cárcel de cinco a siete años.
La ley ecuatoriana castiga a «la persona que para obtener provecho propio o de terceros, promueva u organice la ocupación o asentamiento ilegal en terrenos ajenos».
El máximo de la pena se impondrá a la persona que sin contar con las autorizaciones administrativas necesarias de fraccionamiento de un predio urbano o rural ofrezca en venta lotes o parcelas de terreno del predio y reciba del público, directa o indirectamente, dinero o cualquier otro bien de su patrimonio.
Infracción ambiental
El artículo 245 del COIP castiga la invasión del Sistema Nacional de Áreas Protegidas o ecosistemas frágiles, con pena privativa de libertad de uno a tres años.
La pena máxima se aplicará cuando «como consecuencia de la invasión, se causen daños graves a la biodiversidad y recursos naturales.
Según Inmobiliar, una de las zonas pretendidas por los invasores contiene un ecosistema sensible que alberga un humedal y especies nativas de flora en peligro de extinción, como samanes, Fernán Sánchez, guachapelí, guayacán, guasmo, laurel, entre otras.
En una primera inspección se constató que los invasores cortaron varios árboles en la zona protegida.
