La silla de la primera vicepresidencia era de Virgilio Saquicela (PK), pero al asumir la presidencia del Legislativo, en reemplazo de Guadalupe Llori, destituida el 30 de mayo por presunto incumplimiento de funciones en su gestión, también quedó vacía.
Desde el jueves 14 de julio de 2022, las dos vicepresidencias de la Asamblea Nacional están vacantes. Esto por la decisión de los bloques de la Unión por la Esperanza (UNES), del Partido Social Cristiano (PSC), y de un grupo de disidentes de Pachakutik (PK), y de la Izquierda Democrática (ID), de remover a Yeseña Guamaní.
Ahora, las bancadas de la nueva mayoría se disputan esas designaciones.
Los disidentes de la ID aspiran a un puesto en una de las vicepresidencias con Jhoana Moreira a la cabeza.
Por lo pronto, este es uno de los escenarios que analiza este sector político con proyección a la próxima sesión del pleno de la Asamblea convocada para las 09:30 del jueves 21 de julio.
“Lo estamos analizando, recordemos que (al inicio del periodo legislativo) era una opción poder subir a la vicepresidencia”, relató Moreira.
En la sesión del pleno de este jueves se designarán a los titulares de las vicepresidencias, de conformidad con el numeral 15 de los artículos 9 y 16 de la Ley Orgánica de la Función Legislativa (LOFL). El tratamiento está incluido en el segundo punto del orden del día de la sesión 787.
La carta de PK
Los disidentes del PK, aliados del correísmo, también pugnan por uno de estos cargos. Su carta para esta plaza es Mireya Pazmiño. Este 18 de julio, ella ofició a Virgilio Saquicela un pedido para que convoque al pleno del Legislativo para tratar la revocatoria del decreto 455 con el cual el presidente de la República, Guillermo Lasso, había ordenado el estado de excepción en las provincias de Pichincha, Cotopaxi e Imbabura por las manifestaciones de junio de 2022. protagonizadas por las dirigencias de la Conaie, Feine y Fenocin.
Estrategia de UNES
Para tener los 70 votos necesarios y llegar a una de las vicepresidencias, los disidentes de la ID y de PK requieren obligatoriamente del respaldo de la bancada de la Unión por la Esperanza (UNES).
Sin embargo, estos últimos también aspiran a ocupar la primera vicepresidencia. Desde ese espacio se apelará a las candidaturas de Marcela Holguín, Esther Cuesta y Sofía Espín.
Juan Cristóbal Lloret (UNES),, recordó que, al ser la revolución ciudadana la primera fuerza política debería tener una representación entre las autoridades de la Asamblea basado en un criterio de representación, y experiencia para que no vuelvan a repetirse episodios “bochornosos” como el ocurrido con Guadalupe Llori, señaló.
“Se necesita alguien con experiencia que esté al frente de las vicepresidencias, y personalmente me parece que Marcela, Esther y Sofia cumplen esas expectativas”, aseguró.
Reuniones previas
La bancada de UNES planifica reunirse en las primeras horas de este martes 19 de julio de 2022 para tomar una decisión final. Se reunirán en su sede que está cerca del Palacio Legislativo.
Uno de los criterios que deberá tomar en cuenta el bloque correísta (la mayor fuerza política en la Asamblea) es que por cuenta propia no reúnen los 70 votos, pues UNES tiene 47 curules.
El Partido Social Cristiano (que tiene 15 representantes), los disidentes de la ID (5 asambleístas), y los rebeldes del Pachakutik (6 curules) tampoco alcanzan a reunir estos votos para designar autoridades.
Por ello, Juan Cristóbal Lloret adelantó que se deberán generar diálogos con otras fuerzas, incluso con algunos (de los cinco) independientes.
El PSC no cuenta con un representante en el Consejo de Administración de la Legislatura (CAL) a pesar de ser una bancada constituida.
En su debate interno, UNES también sopesará la aspiración socialcristiana “que puede ser legítima”, afirmó Lloret, quien reconoce que el escenario es complejo porque se deben procesar todas estas características. (SC)