En el 2008, el gobierno del entonces presidente Rafael Correa instauró el Plan de Retorno Voluntario, Digno y Sostenible, para impulsar el regreso de migrantes ecuatorianos.

Los migrantes ecuatorianos tienen beneficios si deciden retornar al país para residir; sin embargo, cada año los incentivos como la exoneración de tributos al comercio exterior de menaje de casa registran menos beneficiarios.

Dentro de esta política, el Gobierno creó incentivos para su retorno. Uno de los principales fue la exoneración de impuesto para que los compatriotas pudieran traer sus muebles, electrodomésticos, equipos de trabajo y hasta vehículos como parte de su menaje de casa.

La cifra de personas que se beneficiaron con esa medida viene cayendo de forma sostenida desde el 2013. El numero de personas pasó de 3 376 en ese año a 719 en el 2020. La mayor caída se dio el último año, debido a la pandemia.

En septiembre del 2017, Nadia (quien no quiso dar su apellido) retornó a Ecuador después de vivir más de tres años en Colombia. Ella empezó a averiguar sobre el trámite en junio de ese año. Para ella, el detalle del proceso para traer sus bienes -en la página web del Servicio Nacional de Aduanas (Senae)- no era claro. En la ciudad donde ella residía, Medellín, no había Consulado de Ecuador, lo que dificultó el proceso. “Para hacer el trámite tuve que buscar información en foros de Internet y conocidos que habían realizado este proceso”, comentó Nadia.

Ella trajo en transporte terrestre sus electrodomésticos, muebles e insumos para abrir en Quito su negocio de pizzería, que inició en el país vecino. Ella decidió traer todo eso porque volver a comprarlo en Ecuador le hubiese costado más del doble de lo invertido.

Para retirar su menaje tuvo que viajar a la frontera donde, por sorteo, Aduanas hizo la revisión de sus bienes y pasó sin problemas. “Aunque no pagué nada en impuestos, sí gasté bastante en el traslado de mis cosas”, señaló la ecuatoriana.

De acuerdo con William Murillo, exministro de la Secretaría del Migrante y asesor legal, además de la falta de información que tienen los migrantes para este trámite hay otros problemas, como el alto costo de la logística para el traslado de los enseres, sobre todo cuando los migrantes vienen de lugares más lejanos.

Además está la burocracia, que complica el trámite en Aduana, donde no hay agilidad ni claridad en el proceso, según Murillo.

Carolina (nombre protegido) volvió al país en el 2016, tras vivir cuatro años en Perú por temas familiares. Unos meses antes de viajar ella averiguó sobre el trámite de exoneración para traer principalmente sus electrodomésticos, porque “le salía caro” volverlos a comprar en el país.