Explicó que respondía a las promesas hechas por el presidente Javier Millei durante su campaña al anunciar los próximos planes de la empresa.
Según afirmó el portavoz presidencial, Manuel Adorni, en su habitual rueda de prensa en la Casa Rosada (sede del Ejecutivo), el cierre del medio “no es parte de una dictadura”, cuando fue cuestionado en esos términos por los primeros pasos que el Ejecutivo dio hacia la clausura de la agencia: el vallado de sus oficinas por parte de la Policía y el bloqueo de su web.
“Esto no tiene nada que ver ni con el pluralismo de la información o de los medios ni con cuestiones que tengan que ver con la libertad de prensa; es solamente cumplir con lo que el presidente prometió en campaña. Ahora el presidente dio la orden de ponerlo en ejecución. No hay mucho más que agregar”, apuntó el vocero.
Plan para Télam
Adoni dijo que Télam acumula pérdidas por 20 mil millones de pesos (unos 24 millones de dólares al actual tipo de cambio oficial) este año, y esta semana “se revelará el plan del gobierno para ‘cerrar la empresa’ y el destino de sus trabajadores”.
A ese respecto, señaló que “los equipos técnicos están analizando las diferentes alternativas”, por lo que no pudo responder si el cierre del medio estatal “es una cuestión que deba o no pasar por el Congreso”.
Como mostró la cuenta oficial de la asamblea de trabajadores (Somos Télam) en la red social X, la puerta del medio vallada a la medianoche del domingo (03.00 GMT del lunes), mientras sus delegados sindicales asistían a esa instalación, en lo que calificaron de “ataque a la libertad de expresión”.
Adorni comentó que con ese dispositivo policial seguramente se quiso “evitar cualquier confusión” y se buscó “mantener la seguridad y la garantía de que no haya nadie que no tenga que estar allí”, ajenos al Gobierno o a Télam.
Igualmente, la web de la agencia muestra el escudo nacional y la leyenda “página en reconstrucción”.
Todos los medios nacionales e internacionales acreditados para la conferencia de este lunes aludieron al cierre de la agencia fundada en 1945, que cuenta con 700 trabajadores e intervenida por el Ejecutivo el pasado 5 de febrero, al igual que los demás medios estatales, y firmaron un manifiesto de apoyo a sus trabajadores.