La adicción a las drogas se convierte en el mayor problema que enfrenta la sociedad, siendo una de las fragilidades del Estado ecuatoriano.
“Mi mujer me dejó porque yo buscaba pelear, buscaba cualquier pretexto para salir a la calle a consumir y eso era un relajante para mí. Me olvidaba de todo”.
Carlos (nombre protegido), es un joven de 31 años de edad que cuenta como es la vida de una persona que sufre las consecuencias del consumo de drogas: “Yo comencé a consumir marihuana y me gustó el estar activo, ahora consumo heroína.”
Nos comenta que, a inicios de 2021, comenzó un tratamiento de rehabilitación con un psicólogo que le recomendó durante 6 meses aislarse, ponerse sueros para limpiar su cuerpo y medicación para controlar su ansiedad por consumir, y el dolor producido por la abstinencia.
“Yo era albañil, pero dejé de rendir bien en mi trabajo y me botaron. No tengo dinero, así que cuando tengo ganas de consumir, le pido a mi mamá para comprarme las pastillas que me quiten esa ansiedad. Yo prefiero pedir para la pastilla que salir a la calle a consumir y ponerme peor. Quiero cambiar. Pero no tenemos dinero, mi mamá es empleada doméstica”, nos dice Carlos.
El 21 de mayo de 2013 fue firmado el documento que establece la tabla de cantidades máximas admisibles para la tenencia y consumo de drogas en Ecuador.
 | El abogado Ramiro Arboleda, agente fiscal de FEDOTI Guayas encargado de casos de narcotráfico y microtráfico de drogas dice que no se puede criminalizar el consumo en base al artículo 364 de la Constitución en el cual indica claramente que las adicciones son un problema de Salud pública, al Estado le corresponde desarrollar programas, coordinar información, y planificar prevención que ayude a mantener el control para el consumo del alcohol, tabaco y sustancias psicotrópicas y estupefacientes. |
Según el agente fiscal, Ramiro Arboleda, el Estado está en deuda con los ciudadanos con un recurso tan importante como lo son las instituciones de rehabilitación, ya que una vez que estas personas que salen de la formulación de cargos y son considerados consumidores, no existe un ente encargado de realizar un seguimiento de sus actividades y conductas. Sin embargo, existen centros de rehabilitación clandestinos que no cuentan con la ayuda de ningún profesional de la salud, y por supuesto eso no avala su rehabilitación.
“El consumo de alcohol u otra sustancia, es síntoma de que algo está mal en la estructura emocional-psicológica-mental del ciudadano”
Silvia Merino Jiménez, psicóloga clínica del cantón Loja, asegura que el consumo de diferentes sustancias se debe a las carencias en el hogar en especial las afectivas y en alguno de los casos desde la vida intrauterina, es decir, la salud mental de la madre: “El desconocimiento de los familiares, genera que se acuse a la persona, disminuyéndole la autoestima y la confianza, generándose el pensamiento de que son malos y no pueden cambiar”, menciona.
Algunas de las manifestaciones, que pueden presentar los consumidores, es el olor a licor, bajas calificaciones, aislamiento, poco aseo personal, cansancio, alejamiento de los amigos, cambio de carácter.
“El consumo de alcohol u otra sustancia, es síntoma de que algo está mal en la estructura emocional-psicológica-mental del ciudadano, generándose por una disfunción en el sistema, el cual es la familia, la recuperación no solo es del paciente, la recuperación es de la familia, ellos deben involucrarse en el proceso terapéutico”, añade.
El Ministerio de Salud creó el Centro Especializado de Tratamiento para Personas con consumo problemático de alcohol y otras drogas (Cetad), el cual fue puesto en marcha en Santa Rosa de la provincia de El Oro, entidad enfocada a ayudar a personas adictas a todo tipo de drogas. “No están solos, el Ministerio se ha enfocado en esta área brinda asistencia y apoyo psicológico y, no tiene costo, ahora es cuestión de que como ciudadanos pidamos ayuda”.
El consumo de drogas en Durán empieza en la adolescencia
El narcotráfico, microtráfico, sicariato y la delincuencia organizada, son algunos de los delitos que convierten a Durán en el segundo cantón más peligroso de la provincia del Guayas.
La venta y consumo de drogas en el cantón Durán, ocurre a toda hora y a la vista de todos, es frecuente encontrarse con adolescentes de 14 y 17 años en las esquinas despistados, desorientados y completamente controlados por estos alucinógenos, así nos manifiesta Carmen (nombre protegido), madre de familia quien ha sufrido en carne propia las consecuencias de la drogadicción de su hijo.
Lucha contra el narcotráfico
Según estos datos, proporcionados por la Policía Nacional, la cantidad de droga decomisada desde enero a noviembre del 2021, se ha incrementado en un 5% más que el año pasado y 7.6% más que hace 5 años.
En mayo de este año asumió la Presidencia de la República, Guillermo Lasso, a seis meses de su gestión se cuestiona sobre el aumento del narcotráfico, la inseguridad que vive el país y la crisis carcelaria, ante esto el Gobierno ha puesto en marcha varias acciones, entre ellas:
- Decretó el Estado de excepción para el sistema carcelario el 29 de septiembre del presente año y rige por 60 días
- Decretó Estado de excepción el 18 de octubre del presente año, rige durante 60 días y es para todo el país, entre sus principales puntos ordena la movilización de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional para resguardar el orden público.
- Presentó ante la Asamblea Nacional el Proyecto de Ley de creación de oportunidades, el mismo que fue devuelto por el Consejo de Administración Legislativa (CAL), pidiendo atender las rectificaciones realizadas en el documento. Esta Ley se refiere a varios temas económico, social, laboral, producción, entre otros.
- Entre las últimas acciones realizadas está la firma del “Acuerdo Nacional” por la crisis penitenciaria, el documento fue emitido este 15 de noviembre y contiene los lineamientos a seguir para realizar un trabajo interinstitucional entre el Gobierno Nacional, Policía Nacional, Fuerzas Armadas, instituciones de Justicia y Participación ciudadana
Desde el legislativo, la Comisión de Garantías Constitucionales, Derechos Humanos, Derechos Colectivos y la Interculturalidad, trabaja en un proyecto de ley denominado “Ley Orgánica de la Juventud”. María Fernanda Astudillo, asambleísta por UNES e integrante de la comisión, manifiesta que: “en este proyecto, por primera vez se reconoce al consumo de drogas como un problema de salud pública, enfermedad física y psicoemocional, que requiere atención prioritaria por parte del ejecutivo para su diagnóstico, prevención y tratamiento; así mismo, incluye la institucionalidad a través de centros especializados en tratamientos de drogas”.
Periodista: Mauricio Banchón
El proyecto ha sido debatido dentro de la comisión y se espera que el pleno de la Asamblea Nacional lo apruebe en el 2022, de esta forma se podrá contrarrestar situaciones que atenten contra los Derechos Humanos establecidos en la constitución.
¿Las drogas alcanzan más a los jóvenes?
Según la OEA, en su último informe del 2019 sobre consumo de drogas en las Américas. Ecuador ocupa el cuarto lugar en prevalencia de consumo de cocaína entre jóvenes estudiantes. El Ministerio de Salud Pública, señala a Guayaquil y Durán como las ciudades con mayores índices de adicción, el fenómeno se concentra en el consumo de la droga llamada “H”, cocaína y heroína, atrapando a jóvenes estudiantes de diferentes edades.
Consultamos a estudiantes universitarios si consideran que la droga está alcanzando a todos los jóvenes en nuestro país, sus respuestas marcaron percepciones divididas, es decir, las mujeres consideran que si hay una gran afectación en los jóvenes, mientras que los varones consideran que no hay tal alcance en los jóvenes, pero que cada vez se evidencian a más adolescentes con problemas de drogas.
Finalmente, los jóvenes consultados por esta redacción, coinciden que el problema en nuestros país en relación al consumo de drogas y la reinserción de los rehabilitados a la sociedad, nos pone frente a diversas situaciones.
Primero, el gobierno ecuatoriano debe asignar los recursos necesarios para implementar políticas públicas que ayuden a las familias a enfrentar este mal a través de la prevención integral al adicto.
Segundo, intervenir con participación intersectorial sobre el fenómeno socio económico de las drogas, enfocado en los derechos humanos, priorizando las capacidades y potencialidades del ser humano, su familia y su entorno, ya que de esta manera se constituye con un voto de confianza para recuperar el tejido social en el Ecuador.
