El ataque vía Twitter por la cuenta de la Secretaría de Derechos Humanos al reconocido caricaturista Xavier Bonilla (BONIL) a quien tildaron de dibujante de adefesios e instaron a dedicarle uno de sus trabajos al presidente Guillermo Lasso.
“Oye dibujante de adefesios dedícale eso a tu amo el inepto y cobarde ese que se esconde en Carondelet”, fue el mensaje escrito en un post del rotativo El Universo.
Rápidamente Bonil instó a esta entidad a dar una explicación. La Secretaría tachó que esto se trató de un hackeo o vulneración en la cuenta de Twitter. Añadieron que se identificó al presunto responsable de esta acción totalmente ajena a esta Cartera de Estado por lo que se tomarán las acciones legales correspondientes para así evitar desinformación.
A mí me gustaría ver el reporte o la huella de aquel “hackeo”. “¿Cuánto duró, y cuáles otros tuits se produjeron en ese hackeo? ¿Quién opera la cuenta y a esa hora? ¿O solo les hackearon para escribir un tweet?”, respondió a la aclaración Xavier Bonilla en su cuenta personal.
De igual manera envío un extenso mensaje donde confesó que esta Secretaría se comunicó con él para informar que el autor del tuit fue un trabajador que este jueves fue separado de la empresa por mal desempeño.
“Precisamente, este viernes fue a entregar las claves pero olvidó un dispositivo con la sesión abierta. Para el quiteño de 58 años el problema es que un funcionamiento con esa inteligencia emocional no es garantía de ecuanimidad e imparcialidad que requiere un organismo del Estado”, escribe en el texto.
¿Más hackeos en el Estado?
Este reciente incidente ocurre 15 días después que el director de Inteligencia Fausto Cobo denunciará similar suceso en su cuenta de Twitter. Desde su perfil exhibieron un insulto al periodista del medio digital La Posta, Anderson Boscán.
“Pongo en conocimiento de la ciudadanía que el tuit que se encuentra circulando en distintas redes sociales, no es de mi autoría. Por lo cual, tomaré las medidas correspondientes. Lamento las molestias generadas”, apuntó Cobo.
