El hallazgo de peces muertos ha llevado a Rumania a iniciar una investigación sobre la calidad del agua. Los ciudadanos de las localidades de Hunedoara y Aninoasa han mostrado su preocupación por lo ocurrido en el rio Jiu y han pedido explicaciones a las autoridades.
“Esto es una bomba ecológica. Hay una capa de espuma en el agua y lo más probable es que esté causada por un agente químico. Es muy importante encontrar la causa y, en mi opinión, debemos rastrear la espuma, como en los cuentos, para encontrar la fuente”, explica un residente en la zona.
Las causas están siendo analizadas por los trabajadores de la autoridad medioambiental, la administración de aguas y los responsables veterinarios y de seguridad alimentaria. El comisario jefe de Hunedoara, Dorel Bretean justifica que “llevamos 3 días revisando la orilla del río, pero no hemos encontrado ningún elemento contaminante. En este momento estamos teniendo en cuenta la falta de oxígeno en el agua, dado el bajo caudal del río, y la ola de calor que afecta a la zona durante los últimos días.
Los peces muertos se han enviado a Bucarest para comprobar si el deceso se ha debido a algún envenenamiento. En los próximos días se seguirá analizando la fauna del río.
